Troublemakers

Troublemakers, la banda francesa que revolucionó la música electrónica
En la escena electrónica de la década del 2000, Troublemakers, una banda francesa formada por Fred Berthet y Lionel Corsini, se destacó con una propuesta innovadora y arriesgada. Con influencias del jazz, el funk y el hip hop, su música se caracterizó por su atractivo sonido experimental que les permitió sobresalir en un universo dominado por los sonidos minimalistas y repetitivos.
En este artículo musical, te invitamos a conocer más sobre la historia y biografía de Troublemakers, el género musical en el que incursionaron, sus mejores canciones y una breve crítica sobre su obra.
La historia de Troublemakers se remonta a la década del 90, cuando Fred Berthet y Lionel Corsini comenzaron a interesarse por la música electrónica. Su primer proyecto juntos fue un dúo llamado Mighty Bop, que editó tres discos con una mezcla de hip hop y jazz. Sin embargo, su principal propuesta llegaría más tarde con Troublemakers.
La banda se formó en 1999 y comenzó a editar sus primeros sencillos bajo el sello Blue Note France. En 2001, lanzaron su primer álbum Doubts & Convictions, que fue muy bien recibido por la crítica y el público. A partir de ahí, comenzaron a realizar giras por todo el mundo, presentándose en festivales como el Sonar en Barcelona, el Tokyo Jazz Festival o el Montreux Jazz Festival.
El género musical de Troublemakers se caracteriza por una fusión de jazz, funk y electrónica, con un enfoque en los samples y las bases rítmicas. Su propuesta se acerca al sonido de otros referentes de la escena francesa como Daft Punk o Air, pero con una influencia más marcada del jazz y el funk.
Entre las mejores canciones de Troublemakers se encuentran Get misunderstood, Chez Roger Boite Funk, Electrorloge y Too old to die. Todas ellas se destacan por su sonido atractivo y la capacidad de la banda para combinar diferentes géneros y crear algo nuevo y fresco. Si te interesa escuchar más de su música, te recomendamos sus álbumes Doubts & Convictions y Express Way, que son excelentes representantes de su obra.
En cuanto a la crítica, podemos decir que Troublemakers fue una banda innovadora y arriesgada, que logró destacar en una época donde proliferaban los sonidos electrónicos minimalistas y repetitivos. Su propuesta se acercaba más al sonido de la música en vivo, con instrumentos reales y una clara influencia del jazz y el funk. A pesar de que su trayectoria se acortó con el paso del tiempo, su legado sigue siendo importante para entender la evolución de la electrónica en Francia.
Si eres un amante de la música electrónica y te interesa explorar nuevos sonidos, no puedes dejar de conocer a Troublemakers. Esta banda francesa es un claro ejemplo de cómo la fusión de diferentes géneros musicales pueden dar lugar a algo novedoso y atractivo. Con una propuesta que combina jazz, funk y electrónica, Troublemakers logró un lugar destacado en la escena electrónica de la década del 2000. A través de sus álbumes, nos dejaron un legado musical que sigue sorprendiendo y encantando a nuevos públicos.